Facebook, WhatsApp e Instagram. El trío calavera se ha puesto en entredicho en multitud de ocasiones tras el escándalo de la empresa de Mark Zuckerberg y Cambridge Analytica. Las tres aplicaciones han sido acusadas de recolectar datos y espiar a sus usuarios con el objetivo de crear perfiles más óptimos desde un punto de vista publicitario. Precisamente el pasado martes de esta misma semana publicábamos un artículo donde poníamos a prueba a Instagram para verificar si la aplicación espía nuestras conversaciones de voz a través del micrófono del teléfono. Lejos de las especulaciones que podemos sacar del banco de pruebas, lo cierto es que Instagram se vale de decenas de elementos para crear un perfil adaptado a nuestro usuario. Elementos los cuales veremos a continuación.
Instagram: el Gran Hermano hecho aplicación
Lejos quedaron los tiempos donde la única información que una aplicación, página web o servicio online se valía de nuestro nombre y correo electrónico para obtener datos que posteriormente servirían para generar un perfil de usuario.
Anuncios personalizados que Instagram muestra en base a nuestra actividad.
Aplicaciones como WhatsApp, Instagram y Facebook se valen de todo lo que Android y iOS ceden a los procesos de la aplicación para conocer nuestra actividad al detalle. ¿No me crees? Basta con recurrir a la Política de datos de Facebook para conocer en detalle el tipo de información que se obtiene y los métodos empleados para este fin.
Lo que Instagram sabe de nuestro usuario en la aplicación
Como la mayoría de aplicaciones que se abastecen de los datos de los usuarios, Instagram analiza nuestro comportamiento dentro de la aplicación al detalle. Comportamiento que va más allá de dar like a una publicación o enviar mensajes directos a nuestro grupo de amigos y que la propia compañía especifica en su hoja de Política de datos.
- Información y contenido que proporcionamos a Instagram: registros en servicios pertenecientes a Facebook (Facebook Ads, Instagram para Empresas…), crear y compartir contenido a través de la aplicación (Historias, fotografías, videos…) y sus metadatos (lugar donde se realizó la fotografía, fecha en la que se creó un video…), enviar mensajes a otros contactos…
- Información de categorías especiales: datos relacionados con posturas religiosas o políticas, enfermedades e intereses relacionados con la salud, procedencia étnica y racial, creencias filosóficas, afiliación sindical…
- Redes y conexiones dentro de la aplicación: información sobre las personas, las páginas, las cuentas, los hashtags y los grupos a los que nuestro perfil está conectado y cómo interactuamos con estos. También la asiduidad y afinidad de contacto con otras personas e información como SMS, libreta de direcciones y números de teléfono.
- Nuestro uso de Instagram: el tipo de contenido que consumimos, las funciones que utilizamos (comentarios, likes…), la hora, la frecuencia y la duración de nuestras actividades dentro de la aplicación, las funciones usadas en la cámara de Instagram, si usamos Instagram para efectuar compras u otras transacciones económicas, los datos de pago (número de tu tarjeta de crédito o débito, número de cuenta, los detalles de facturación, envío y contacto…), el tipo de compra realizada etcétera
- Actividad con otros usuarios e información que estos proporcionan sobre nosotros: datos procedentes de las interacciones de otros usuarios con respecto a nuestro perfil. Comentar o compartir publicaciones, enviar mensajes directos, sincronizar la agenda de contacto con la agenda de productos derivados de Facebook (Instagram y WhatApp)…
Lo que Instagram conoce de nuestro usuario fuera de la aplicación
La actividad de Instagram para conocer nuestro perfil no se limita a la aplicación. Desde que concedemos los permisos requeridos por la aplicación, la compañía recopila una serie de datos que beben directamente del hardware de nuestro teléfono.
- Operaciones y acciones realizadas con el teléfono: información sobre los comportamientos realizados en el dispositivo. Poner una aplicación en primer o segundo plano, interactuar con aplicaciones de terceros, mover los dedos a modo de ratón dentro de una determinada aplicación…
- Señales y conexiones del teléfono: información sobre el WiFi, el Bluetooth y la red de telefonía móvil, así como los dispositivos cercanos al teléfono y el nombre y las características de cada una de las conexiones del teléfono. Número de teléfono, dirección IP, velocidad de Internet, el proveedor de Internet, el idioma, la zona horaria…
- Características del teléfono: información como el sistema operativo, el modelo de teléfono, el nivel de carga de la batería, el nivel de la señal de la red móvil, el espacio de almacenamiento disponible en el teléfono y el nombre y el tipo de las aplicaciones instaladas en el sistema.
- Datos de la configuración del teléfono: acceso a la información suministrada por la ubicación del GPS, la cámara, las fotografías y otros elementos del dispositivo.
- Cookies del teléfono: información procedente de las cookies almacenadas en el dispositivo, tanto del navegador como de las aplicaciones de terceros. Páginas web visitadas, registros, sitios web anclados…
Qué implica que Instagram sepa todo sobre mi
La Ley de Protección de Datos Europea, junto con la ley homónima estadounidense, nos dice que el tratamiento de los datos está limitado a ser usados como producto para mostrar publicidad personalizada dentro de la aplicación previa aceptación de las cookies. ¿Qué dice Instagram de todo esto?
La información recolectada por Instagram está limitada a ser usada como usufructo para la personalización de la publicidad.
La aplicación especifica lo siguiente:
«Esta y otra información (como el origen étnico o racial, las creencias filosóficas o la afiliación sindical) está sujeta a protección especial en virtud de la legislación de la UE. Nuestros sistemas realizan automáticamente el tratamiento del contenido y las comunicaciones que tú y otras personas proporcionáis para analizar el contexto y lo que incluyen en relación con los propósitos que se describen a continuación.»
Las implicaciones de esta cláusula vienen a confirmar lo que la distintas leyes actuales en materia de protección de datos dicta: la información sensible está sujeta a ser protegida por el propio servicio de Instagram. Mención especial al apartado donde se especifica que la información es tratada de manera automática por sistemas integrados en la aplicación, lo que quiere decir que la información procesada no pasa por ningún sistema humano que pueda identificarnos como un usuario único.
